A lo largo de la vida las personas pasamos por situaciones que nos obligan a adaptarnos, a modificar nuestros patrones de conducta. Cuando no nos adaptamos, las personas necesitamos apoyo psicológico.
Nuestros pacientes principalmente son menores de edad, con dificultades familiares, personales y sociales, y también sus familias. Para ello ofrecemos un afrontamiento tanto cognitivo – conductual como sistémico. Estas formas de afrontar la intervención facilitan que nos centremos en las conductas que presentan dificultades, pero también en las relaciones entre los miembros y las interacciones que surgen en la familia. Así ofrecemos un tratamiento más completo.
En nuestra intervención promovemos un crecimiento personal de los menores y el desarrollo de todos los miembros en la familia.
Entre nuestros objetivos está la identificación de los los patrones que nos llevan a sentir malestar. Esto se lleva a cabo a través las evaluaciones psicológicas que ofrecemos en Psicosol. Tras esta evaluación ofrecemos un marco de confianza y seguridad desde el que se comienzan los cambios.